Esta obra aborda una realidad dura, sufrida por numerosos jóvenes. Me gustaría que vieran en ella un poco de esperanza para no perder la fe, pues con ella de todo se sale; de la dureza del mundo de las drogas, de la inadaptabilidad y de la exclusión. Cada uno sabe dónde deposita su fe y qué es lo que espera, a pesar de la negrura del camino y del momento vivido, la fe es lo que siempre nos acompaña.