La vida de Daniel Quijada cambia radicalmente cuando un incendio destruye su casa, y su madre queda en coma. Daniel y su padre tendrán que empezar de cero en un pueblo de la España vaciada. Aburrido sin sus videojuegos, Daniel se distrae mirando las manchas de su nuevo y destartalado colegio. Su profesora se percata de que es muy imaginativo y le llama Dan Quijote de la Mancha. Cuando Daniel descubre que el famoso caballero era un justiciero, decide imitarlo. La imaginación se convertirá en un superpoder. Así, Dan Quijote empezará a trabajar por un mundo más justo. Su primer caso será encontrar a una anciana que ha desaparecido.