"El hombre, al fin, será vencido". Así comienza El Enjambre del Cielo, la opera prima de Álvaro A. Roma, una novela de ciencia ficción con un estilo inconfundible desde la primera página. La trama se centra en las vivencias de un grupo de supervivientes en un mundo asfixiado y gris, donde los árboles secos se retuercen sobre el asfalto, pero lejos de estar solos, hasta las mismas sombras se levantan del suelo para escurrirse entre los edificios. En este marco desolador, un extraño personaje parece tener todas las respuestas excepto una: ¿existe realmente la virtud del hombre, o ese es un don que ya hemos desperdiciado?