Jugadores: 2 - 4 jugadores
Edad: A partir de 8 años
Duración: 30 min.
Sois brujas en el Bosque Encantado, construyendo vuestra casa de caramelo y atrayendo personajes de cuento hambrientos con caramelo de colores. La bruja que construya mejor su casa, y consiga más puntos mientras lo hace, gana y ¡será declarada la bruja más astuta de todas!
Érase una vez un brujo que vivía en una cabaña en lo más profundo del bosque. Le encantaba hornear deliciosos panes de jengibre para decorar su casita. Pero la felicidad duraba poco en casa del brujo porque una y otra vez las descaradas criaturas de los cuentos de hadas atravesaban el bosque solo para comerse sus bellas decoraciones. ¿Qué podría hacer al respecto? ¿Cómo impedir que esos seres, una y otra vez, destruyeran su hogar? Después de pensarlo mucho tiempo recordó unos pasteles que tenían fama de ser los favoritos por todo el mundo mágico y se le ocurrió una idea para deshacerse de los ladrones para siempre
La Casa de Caramelo es un juego rápido y divertido para toda la familia en el que de dos a cuatro jugadores a partir de 10 años comparten aventura con dragones, hadas y otros personajes clásicos de los cuentos. Os metéis en la piel de un hechicero, como tal tienes que construir tu propia morada y hornear pan de jengibre.
Con estas delicias atraerás a los personajes de los cuentos de hadas más variopintos que puedas imaginar y así, además, conseguirás puntos. Aquel que más éxito coseche atrayendo a esos bribones que solo buscan comerse su casita será el ganador de la partida.Con tu pelo y tus ropajes al viento, subido en tu escoba, sobrevuelas el bosque. Este último aquelarre ha sido muy entretenido pero estás deseando llegar a casa y meterte en tu camita. Con los primeros rayos de sol distingues, a lo lejos, el brillo del glaseado del pan de jengibre y el caramelo
pero ya intuyes que algo pasa
Esperas que no sean ellos una vez más, esos ladronzuelos, esas criaturas mágicas que se creen con derecho a todo. Cuando llegas compruebas que a tu casa le faltan algunos trozos y un rastro de migas se pierde en la profundidad del bosque. No aguantas más, así que te decides a atraerles para de una vez por todas darles una lección que no olviden. Por suerte, tienes la receta perfecta para atraer a La Casa de Caramelo a esos glotones.