En esta obra Maese Mercador nos lleva a una especie de antesala de la muerte en donde las personas se preparan para el examen final repsando sus vidas. A través de multitud de interrogantes y diálogos, Maese nos sirve de hilo conductor en esa revisión vital. Nos hace reflexionar sobre si vamos bien o mal, si nos hemos desviado o errado el camino. Al fin de cuentas, todos nosotros estamos a tiempo de rectificar, reflexionar, meditar y, sobre todo, de actuar en consecuencia. Maese nos invita a hacer un alto en el camino y a plantearnos cómo llevamos preparado ese examen final para el caso en que la muerte nos alcance de repente.