Tras un intenso recorrido descendiendo por las entrañas del presentehasta el comienzo de la vida, llego a la conclusión de que somos todoaquello que sentimos y pensamos. Esa fusión de pasado, presente yfuturo. Los sentimientos que nos hacen diferentes siendo iguales. Elpersonaje femenino puede ser cualquiera, hombre o mujer. Alguien conla necesidad de viajar por el tiempo en una vida real o inventada para dar paso a otras historias. æDesnudarse del revésÆ es el juez quesentencia y al mismo tiempo el verdugo que mata, con premeditación yalevosía, a æEl deseo viste de verdeÆ porque en estas páginas queacabáis de leer no existe el verdadero deseo, lo que se palpa en cadarelato es la fragilidad de Ana, una mujer aparentemente fuerte quedefiende a ultranza la importancia de formar parte del universo de las emociones. Sin embargo, en cada relato los propios sentimientos lavan engullendo e incluso frustrando, hasta el punto de que cadaemoción contada la hace más vulnerable porque desnudar el alma siempre tiene un precio. No podemos olvidar que el verdadero peaje de laexistencia es la muerte. Los regal
