Esta historia se desarrolla durante trece días de finales del año 2019, mientras germinaba una pandemia. La crisis económica y la separación de su familia convirtieron a Román en un arquitecto ensimismado. Pertenece al Colectivo Leopoldo, dedicado al contubernio arquitectónico, la defensa del patrimonio natural y a la búsqueda de la belleza oculta en la ciudad. Un capricho del destino pone en escena al Marcianito, compañero de Román en el Madre de Dios, al que arrastrará hacia el fantasma de la Cuesta del Carnicero, a los crímenes de Halloween y al Molino de Viento, un club de alterne donde reina Mercedes Joya, una mala imitadora de Mae West. Transitar bajo el claustro de un antiguo convento o enterrarse en las entrañas de los cabezos, esas son las opciones que tiene Román para continuar el viaje hacia lo desconocido, que le llevará a descubrir un mundo mágico del pasado.
